Presentación

Desde Enraonart queremos agradecer a los lectores la buena acogida del libro, La realidad en cuestión.

 

Tal como se había anunciado, el pasado jueves día 19 de abril se hizo una presentación oficial en la biblioteca Marc de Vilalba de Cardedeu, y allí tuvimos la oportunidad de disfrutar de la entrañable compañía de muchas personas interesadas por la filosofía, la práctica del diálogo y el ejercicio del pensamiento libre.

 

 

Sabemos que muchas personas que tenían previsto asistir no pudieron hacerlo por variadas razones prácticas. Por este motivo, hemos pensado que sería una buena idea compartir con ellas un extracto de las intervenciones de Abel Gelabert (director de comunicación de Enraonart) y de Josep Montes (autor del libro).

 

 

Intervención de Abel Gelabert:

 

Josep Montes y Abel Gelabert

 

En esta introducción inicial intentaré responder, sin alargarme más de la cuenta, tres preguntas: ¿Qué es Enraonart? ¿Por qué Publicaciones Enraonart? ¿Quién es Josep Montes?

Pero primero quiero agradeceros vuestra presencia en este acto, la generosa acogida de la biblioteca y los amables comentarios que acaba de hacer el editor, Jonathan Gelabert.

Bueno, empecemos con la primera pregunta:

 

– ¿Qué es Enraonart?

 

Enraonart es una asociación cultural y educativa dedicada de manera primordial a la difusión del patrimonio cultural y el fomento de la reflexión compartida sobre la realidad en que vivimos.

 

El proyecto Enraonart se fundamenta en la convicción de que un diálogo sincero, respetuoso, y guiado por la razón, es un camino de conocimiento que nos permite acceder a nuevos horizontes de comprensión.

Por este motivo, desde Enraonart trabajamos con una metodología arraigada en el diálogo filosófico, y en el valor esencial del respeto entre las personas. Es decir, nos situamos en el área en que la confluencia entre metodología y ética hacen posible la experiencia de la comprensión en un doble sentido: como descubrimiento de lo que no entendíamos, y como aproximación auténtica a la persona o a las personas con las que hablamos.

Es en este espacio de confluencia entre el diálogo responsable, y el respeto recíproco, donde Enraonart encuentra su verdadero sentido y muestra más plenamente su proyección cultural, educativa y social.

En efecto, Enraonart se define por hacer de la cultura su contenido, del diálogo su método, y de la mejora de la sociedad su objetivo.

 

– ¿Por qué Publicaciones Enraonart?

 

Publicaciones Enraonart sirve a un propósito fundamental: difundir ideas que ayuden a comprender mejor el mundo en el que vivimos y sirvan para vivir, en él, de una manera más digna y auténtica.

La realidad en cuestión es el primer libro de Publicaciones Enraonart en colaboración con la editorial Bibliasfera dirigida por Jonathan Gelabert. Esta línea de publicaciones que acabamos de abrir con La realidad en cuestión tiene el objetivo de presentar una nueva visión de la realidad, explorar sus implicaciones prácticas y fomentar el debate y la reflexión personal.

 

– ¿Quién es Josep Montes?

 

En pocas palabras, y tal como se puede leer en el Web de la asociación, Josep es un filósofo vocacional que además tiene una licenciatura en filosofía y ciencias de la educación por la Universidad de Barcelona y un Máster en la «La Cultura de la Metrópolis» por la Universitat Politècnica de Catalunya.

En los años 90 colaboró ​​intensamente con el GrupIREF (Grupo de Innovación e Investigación para la Enseñanza de la Filosofía) en diversos proyectos expositivos como, Criatures Misterioses o La Capsa màgica.

Por otro lado, su relación profesional con el mundo de la cultura y la educación, ha estado siempre relacionada con los Museos de Barcelona donde ha realizado visitas guiadas, talleres, diseño de proyectos educativos, formación de equipos de educadores, y, también, cursos y seminarios para profesores.

Por otra parte, y como él suele decir, le gusta correr en solitario y cultivar, a diario, asombros y perplejidades.

En estos momentos es el director cultural de Enraonart.

 

Y dicho todo esto ¿qué tal si nos cuentas ahora por qué este título? Y, ya puestos, ¿de qué trata el libro?

 

Intervención de Josep Montes:

Josep Montes y Abel Gelabert

Buenas tardes. En primer lugar, quiero agradecer a mi amigo Abel sus palabras, a los organizadores la buena organización y a los presentes su presencia.

 

¿Por qué el título, La realidad en cuestión?

Porque es un título que pone de manifiesto un fenómeno lingüístico que a mí me resulta fascinante. Me refiero al doble sentido. Palabras o expresiones que tienen, al mismo tiempo, dos significados diferentes y complementarios.

 

Por ejemplo, si decimos, la realidad en cuestión, por un lado estamos dando a entender que hablamos de la realidad de verdad, pero también estamos sugiriendo que se trata de una realidad que nos podemos cuestionar que, de hecho, nos cuestionamos.

 

Y, precisamente, este libro que reúne 14 ensayos transversales de filosofía, arte y ciencia tiene esa pretensión; abordar directamente la realidad como tema y interpelarla como problema. Para mí, La realidad en cuestión sirve para poner de manifiesto que la realidad es la gran cuestión. Quiero decir, que se trata de una cuestión decisiva, una cuestión radical, porque en función de qué pensamos sobre ella así es nuestra relación con ella y, eso tiene claras consecuencia en nuestra nuestra vida.

 

Por ejemplo, no es lo mismo pensar que el hombre (como realidad natural) es como afirmaba Thomas Hobbes, un lobo para el hombre (Homo, homini lupus), que estar convencido, como Rousseau, que el hombre ( sin socializar) es bueno por naturaleza. Sin duda, ni la idea del papel del Estado, ni de las instituciones, ni de la educación serán las mismas si pensamos como Hobbes o como Rousseau.

 

Los pensamientos son realidades que definen nuestra relación con la realidad. Y aquí ya se explicita la idea central del libro, que se podría formular de la siguiente manera:

Las personas somos creadores de realidad. No somos los creadores de la realidad, pero sí tenemos la facultad de crear con la realidad nuevos tipos de realidad: ideas, valores, significados… en definitiva, sentido.

 

Para no alargarme demasiado intentaré dar una idea del contenido del libro a partir de una de las historias que cuento en el capítulo titulado, Kandinsky en teoría.

 

Pero antes, os invito a hacer un pequeño experimento mental. Me gustaría que dedicáramos un minuto a imaginar qué diría un niño de 8 años, ciego de nacimiento, si después de una operación quirúrgica volviera a recuperar la vista, la capacidad para ver.

 

Y ahora sí, os cuento la historia de un niño que realmente vivió esta experiencia:

 

Con los ojos no hay suficiente.

 

El Dr. Marius von Senden publicó en 1932 un libro, sorprendente y atractivo, donde presentaba de manera exhaustiva más de 60 casos de personas ciegas de nacimiento que, tras una intervención quirúrgica, habían recuperado la vista.

En este completo estudio se puede leer la emotiva historia de un niño de ocho años, ciego de nacimiento, que los doctores, Moreau y Leprince, operaron con éxito en 1910.

Después de realizar la delicada intervención quirúrgica el niño estuvo unos días, como era preceptivo, con los ojos vendados, y en reposo casi absoluto. Finalmente, y con un mucha preocupación y nerviosismo, los médicos le quitaron las vendas que le cubrían los ojos, y lo examinaron con atención. La respuesta de los ojos fue la que esperaban y deseaban, la misma que habrían mostrado unos ojos sanos. Pero cuando uno de los médicos movió la palma de su mano derecha ante los ojos del niño y le preguntó:

– ¿Qué ves?

El chico, un tanto desconcertado y con dificultades para fijar la mirada, dio una respuesta que los dejó helados:

– No sé.

– No ves el movimiento? – le preguntó el médico con un cierto grado de ansiedad.

– No sé – repitió el niño.

Entonces los doctores le dejaron ayudarse de las manos, y cuando, por fin, estas se encontraron con las del médico, el niño exclamó con alegría.

– Se mueve.

Los doctores Moreau y Leprince, repentinamente, fueron conscientes de que el niño, a pesar de haber recuperado la capacidad de ver, aún no sabía qué era lo que veía.

 

Moreau escribió:

«Sería un grave error pensar que un paciente (ciego de nacimiento) que ha recuperado la vista tras una operación quirúrgica ya está en condiciones de ver el mundo que le rodea. Los ojos recuperan la capacidad de ver, pero el uso de esta capacidad, es decir, el acto de ver todavía se debe aprender desde el principio. La operación sólo prepara los ojos para ver; la educación es el punto más importante… Devolver la vista a una persona congénitamente ciega es tarea de un educador, no de un cirujano. »

 

Como acabamos de comprobar unos ojos sanos son imprescindible para ver, pero también creo que resulta evidente, que para llegar realmente a ver y entender el mundo que nos rodea, además de los ojos, se precisa un lento aprendizaje. Se requiere, en última instancia, la activa participación del cerebro, que es el órgano encargado de procesar y dar sentido a la información que le llega del mundo exterior.

Así pues, cuando un paciente ciego de nacimiento abre los ojos tras una operación, no ve a su alrededor el perfil bien delimitado de las cosas, ni los variados colores de los objetos, ni las formas nítidas de los rostros humanos, ni el volumen, ni la profundidad. Ve un mundo de impresiones confusas que le generan una intensa inquietud y amenazan la seguridad sensorial en el que vivía hasta ese momento.

Podríamos decir, que los ojos han abierto sus puertas a la luz, pero los programas neuronales que nos permiten construir un mundo visual con sentido continúan en la oscuridad y no responden a la llamada que realizan los impulsos nerviosos que les llegan a través del nervio óptico.

 

Ahora bien, todo esto nos plantea un apasionante problema filosófico:

¿Es la realidad lo que vemos cuando hemos aprendido a ver o tal vez es lo que nunca podremos comprender?

 

Entre la espontánea respuesta del niño que dijo «no sé» porque no comprendía lo que veía, y la respuesta contundente de un adulto que lo ve todo claro, porque ya ha aprendido a ver y no se cuestiona nunca lo que ve, hay un campo de reflexión que es el que explora con humildad este libro.

Podríamos decir, para terminar, que el libro parte de la realidad que comprendemos para acercarnos a la realidad incomprensible. Y, por ello, no sería erróneo decir que La realidad en cuestión nos intenta situar ante los límites de la comprensión.

Cierre de las intervenciones y de la presentación por parte del editor, Jonathan Gelabert.

 

Fotografías de Esther Feliubadaló · www.estherfeliubadalo.cat